Impresión 3D y aplicación en odontología Leave a comment
La salud bucal ha sido un tema bastante importante en los últimos años, gracias a campañas de concientización se ha buscado que las personas piensen más en la prevención y el buen cuidado de sus dientes, más que en la restauración de los mismos. Sin embargo, para algunos casos es necesario recurrir a la colocación de prótesis dentales; lo que muchas veces puede resultar incómodo o requerir ajustes periódicos si no se realiza un trabajo de manera eficiente.
La impresión 3D ha revolucionado distintos sectores, y además ha ampliado las aplicaciones de esta nueva tecnología en diversos campos como la odontología. El principal objetivo de esta técnica consiste en hacer de manera más eficiente las tareas que hoy día se realizan de “forma artesanal” en las que se pueden cometer errores. Además, se busca ofrecer una solución personalizada para cada paciente, disminuir los costos de elaboración de las prótesis e innovar con distintos materiales. Alguna vez te has preguntado, ¿Cómo funciona la tecnología 3D en el campo de la odontología? si es así, te invito a seguir leyendo este artículo para que conozcas un poco más de esta tema tan interesante.
La impresión 3D es también conocida como prototipado rápido y es una tecnología de fabricación aditiva. El proceso consta de tres principales partes. Se inicia con la digitalización, que puede realizarse con un escáner externo, un escáner intraoral o tomografía dental. La ventaja que tiene el escáner intraoral sobre el externo, es que permite obtener una réplica digital inmediata de las piezas dentarias, mientras que con el segundo se debe hacer una réplica en yeso. El tomógrafo únicamente sirve para planificar la posición de los implantes. Luego de esto se realiza el procesamiento de datos, que a través de un sistema, permite la reconstrucción de los modelos digitales obtenidos anteriormente. A partir del modelo digital se realizan los ajustes necesarios y se diseña la nueva prótesis o puente de piezas dentales.
Finalmente, esta información es enviada al laboratorio donde tiene la impresora 3D. Allí con esta información, se crea un modelo que reproduce la boca del paciente. De manera general, el procedimiento de impresión 3D es el siguiente: la impresora, a partir de las instrucciones del archivo de diseño, deposita y solidifica el material. Una vez que se solidifica la primera capa, continúa repitiendo el mismo proceso de tal manera que, capa a capa se va conformando el objeto tridimensional diseñado.
